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  El té, viniendo del imperio chino,
se encontró con la salvia en el camino.
Ella le dijo: "Adónde vas, compadre?"
"A Europa voy, comadre,
donde sé que me compran a buen precio."
"Yo", respondió la salvia, "voy a China,
que allá con sumo aprecio
me reciben por gusto y medicina.
En Europa me tratan de salvaje,
y jamás he podido hacer fortuna.
Anda con Dios. No perderás el viaje,
pues no hay nación alguna
que a todo lo extranjero
no dé con gusto aplausos y dinero".
La salvia me perdone,
que al comercio su máxima se opone.
Si hablase del comercio literario,
yo no defendería lo contrario,
porque en él para algunos es un vicio
lo que es en general un beneficio;
y español que tal vez recitaría
quinientos versos de Boileau y el Tasso,
puede ser que no sepa todavía
en qué lenguas los hizo Garcilaso.
Algunos sólo aprecian la literatura extranjera y no tienen la menor noticia de la de su nación.
 
TOMAS DE IRIARTE
Incluido en Poesía española del siglo XVIII. Edición de Rogelio Reyes. (Texto de edición de Sebastián de la Nuez. Madrid. Editora Nacional. 1976). Cátedra Letras Hispánicas nº 277. Ediciones Cátedra.
http://www.poesia-inter.net/indexti.htm
     
 
     

(1750-1791) Comenzó su carrera literaria en Madrid haciendo traducciones de obras teatrales francesas: El señorito mimado, La señorita malcriada, El don de gentes, La librería. También escribe un monólogo dramático, trata por enésima vez entre los autores españoles, el tema de Guzmán el Bueno.
Escribió un poema didáctico y obtuvo una gran fama con la (1779), escrita en silvas. Tuvo un gran eco en Europa; el éxito radica en la estructura del poema y en la profundidad. Como poeta didáctico, su poema La música es fundamental. La obra realmente interesante es Fábulas Literarias; esta obra le dio una gran popularidad, siendo un compendio de doctrina clasicista; las ideas están presentadas bajo un disfraz fabulesco. Es un compendio de metros distintos. Representan algo totalmente nuevo en la literatura española, en su conjunto constituye una disertación didáctica en la que expresa sus ideas respecto a las tendencias literarias de la época. La presencia de Horacio, de Muratori y de Boileau se hace patente en su obra. Según Iriarte se debe escribir con un estilo actual, claro, y se debe combinar lo bello con lo útil; también se debe combinar lo natural con lo racional (por este componente racional, muchos autores del s XVIII nos resultan fríos). El autor, según Iriarte, debe ser fiel a su época lingüísticamente, no manchando su lengua con barbarismos. Las fábulas literarias fueron innovadoras, formalmente hablando, en la época. Es en esta época cuando nacen las tertulias literarias.
http://www.geocities.com/Hollywood/Hills/7985/literatura3.htm

     
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